31.8.07

Holograma

Llega temprano pero no hay nadie todavía. Se sienta delante de una ventana artificial y una cosa lo lleva a la otra y así sucesivamente. Mientrastanto fuera cae el sol víctima de la noche que se aproxima. No sabe que mañana no volverá a salir. Todo esta enlazado. Todo menos la realidad.

30.8.07

Batido de chocolate

a veces pienso y miedo me da pensar lo que pienso por lo que me obligo a pensar que debería dejar de hacerlo y ¿entonces qué?






entonces cinco cucharadas de cacao.

1.8.07

A y B (1a parte)

"(...) Y todo eso hace que esté un poco hasta las narices. ¿Sabes? Hace ya algún tiempo que no disfruto... No me entiendas mal... No estoy diciendo que no sea feliz ni nada de eso. Es simplemente que ya no es como antes. ¿Cómo antes? Si quieres que te sea sincero, tampoco sé si antes lo hacía o, por el contrario, creía que lo hacía. A ver, estoy enamorado, y eso es bueno, pero al margen de eso todo lo demás es fruto de la inercia. Hago cosas pero, ¿por qué? La verdad, no disfruto de ellas. No hay nada que me apasione. Estoy cansado de hacer lo que hago e invento cualquier excusa para huir... A cuál más estúpida. De verdad, me sorprendo a mí mismo con lo que soy capaz de inventar para evadir mi responsabilidad. ¿Por qué no soy capaz de arrodillarme ante la evidencia? Lo mejor de todo es que lleno mi tiempo con cosas que tampoco soy capaz de resolver con esmero... ¿Acaso no hay nada que me apasione? ¡Me apasiona lo nuevo! Creo... Pero el problema es que todo, tarde o temprano, deja de serlo. Me desenvuelvo bien en las distancias cortas... Y luego está lo que la gente espera de mí... La gente tiene una imagen de mí que no se corresponde con la realidad. Se han quedado anclados en un pasado que, a día de hoy, francamente, ya no recuerdo, o no quiero recordar... todo el mundo asume que estoy bien y, la verdad, yo tampoco me esfuerzo en demostrarles que se equivocan. De alguna manera disfruto con esa imagen, me hace sentir bien... O sea, como un orgasmo... Tan pronto viene, como se va, pero es agradable. ¿Qué me pasa? No tengo ni idea de donde voy a estar mañana. Sueños tengo... Muchos, pero me asusta la idea de enfrentarme a ellos, pues en ese momento dejarán de ser sueños para convertirse en algo nuevo, y ya sabes lo que pasa con todo lo nuevo... ¡Mi cabeza no para! A veces, me gustaría encontrar algo que se me diera realmente bien, algo que de verdad se me diera bien... Algo que de verdad me apasionara... Porque no, lo que hago no se me ha dado nunca bien. Se me ha dado, sí, pero de ahí a decir que se me ha dado bien. Mis amigos así lo creen. Pero eso se debe a que soy bueno en el mano a mano, en parecer que camino con seguridad al margen del mundo... ¿Sabes? Quizás ese sea el problema. No es que sea bueno a la hora de aparentar, sino que... ¡Soy así! Nunca he aparentado, simplemente soy así. En algún momento me desconecté de la realidad y desde entonces... Nada es importante... No entiendo lo que significa ser responsable, el tener la responsabilidad de alguna cosa. No entiendo la ambición, el odio... ¡Nada! Sin embargo entiendo el amor, le he entendido, cuatro veces, creo... Quizás una, y lo dejé marchar... Lo dejé para encontrarlo ahora donde no quise verlo... Y eso duele... ¿Lo entiendo? Mira, aunque estoy seguro de que nunca he sido más sincero contigo que ahora, no tengo ni idea de lo que estoy tratando de decirte... He perdido el hilo..."

"¡De eso ya me había dado cuenta yo! De verdad, cuando te pones así... Ahora recuerdo porque te llamábamos pitufo filósofo... ¡Otra cerveza!" Dirigiéndose al camarero. "Tú, por supuesto, no quieres nada... Me gustabas más cuando bebías, la gente que no bebe, no sé... ¡Me sacan de quicio! Ahora en serio, deja de recrearte en uno de tus personajes, ¡cómo te gusta hacerlo! Se nos va el tiempo volando y no sé cuando voy a volver a verte... De verdad, en serio, ¿cómo te encuentras?"

"Nunca he hablado más en serio. ¿Acaso no lo crees?"

La incomodidad de un silencio que se agrieta es percibida por ambos.

A agacha la cabeza y encuentra una cajetilla de tabaco en el bolsillo de su chaqueta y se lleva un cigarrillo a la boca y pide fuego al camarero que acaba de servirle una cerveza e inspira y expira y bebe y se muerde una uña y se refugia en las curvas y rectas de un cuadro abstracto colgado en la pared.

B llora.